El fin de semana pasado fui a la feria del pueblo con mi familia. Había muchas luces, música y puestos de comida. Decidimos probar tacos y churros, que estaban deliciosos. También vimos a un grupo de música tocando canciones típicas, y muchas personas bailaban alrededor.

Después, fuimos a los juegos mecánicos, y mi hermano subió a la rueda de la fortuna. Fue una experiencia muy divertida porque disfrutamos de la comida, la música y la alegría de la gente.

Sin duda, quiero volver a la feria el próximo año.