Hace poco volví a hablar con mi mejor amigo después de años sin contacto. Es triste que hayamos perdido comunicación, pero me alegra que ahora podamos hablar de nuevo. Le conté cómo han sido mis últimos años y escuché sus historias.

Fue una conversación difícil porque ambos nos dimos cuenta de cuánto habíamos cambiado. Sin embargo, también compartimos recuerdos que nos hicieron reír.

Espero que sigamos en contacto y que nuestra amistad sea como antes. Hablar con él me hizo sentir nostalgia, pero también felicidad de tenerlo nuevamente en mi vida.